
Ahorrar energía dentro de la oficina puede ayudar a reducir las cuentas de la compañía, además de reducir la contaminación y la demanda del uso de plantas de energía. Esto lo puedes lograr de muchas maneras; aquí te damos algunas ideas y recomendaciones para que logres reducir la energía utilizada en tu oficina de manera fácil.
- Actualiza tu equipo de oficina:
- Existe un nuevo tipo de maquinaria que cuenta con la certificación de «energy star» que asegura que cada pieza de maquinaria está especialmente hecha para reducir y ahorrar costos en consumo de energía.
- Utiliza impresoras de tinta y no de láser, lap-tops en lugar de computadoras de escritorio, para poder ahorrar hasta un 90% de energía.
- Apaga la electricidad al final de cada día de trabajo: Los protectores de pantalla en las computadoras y los modos de inactividad en otros tipos de equipo todavía consumirán energía cuando no esté en uso.
- Conecta todos sus aparatos electrónicos en una sola tira de energía con esto lo podrás desactivar todas las noches de manera más fácil.
- Electrónicos tales como computadoras y fotocopiadoras seguirán consumiendo energía cuando están enchufados aunque se han apagado por completo. ¡Mejor desenchúfalas!
- Habilita los modos de hibernación y de sueño en los equipos de oficina sólo cuando sepas que será por un pequeño tiempo, al final del día es necesario apagarlos en su totalidad.
- Aprovecha la luz solar natural si tu oficina está configurado para recibir una amplia cantidad de luz solar. Si no es así, puedes optar por recortar árboles y arbustos cerca de las ventanas para maximizar su exposición a la luz solar y reducir las sombras .Otra forma de captar más luz dentro de tu oficina es pintar las paredes de un color claro o incluso blanco, de esta forma la luz rebotará mejor.
- Limpia y repara la calefacción, ventilación y aire acondicionado de forma rutinaria. Un sistema de climatización limpio y en funcionamiento te ayudará en gran medida a reducir tus facturas de energía, mientras que un sistema de climatización sucia o defectuosa trabajará más duro para enfriar o calentar tu oficina.
- Limpia o reemplaza los filtros de aire de climatización de la oficina y de limpieza todos los evaporadores, condensadores, bobinas, y las superficies de intercambio de calor al menos una vez por mes.