
Seguramente nos hemos encontrado en la calle con varios botes de color azul y lo primero que se nos viene a la mente es el papel.
El papel es un material que usamos con bastante frecuencia. Realizamos diversas actividades desde leer el periódico, ojear revistas, consultar nuestra agenda para ver el orden de nuestros días, guardar nuestro mandado en bolsas de papel hasta recoger cartas o folletos publicitarios en el buzón. Sin duda, el papel es un material que está presente a diario en nuestra vida; por lo que reciclarlo es de vital importancia para que pueda ser recuperado y empleado de nuevo, pero transformado en otro producto.
La producción de papel proveniente de materiales reciclados como trapos desechados de algodón y lino viene de Alemania y desde ahí se comenzó a producir el papel a partir de árboles y fibra de madera.
Existen tres tipos de materia prima que pueden utilizarse como papel reciclado:
- Papel molido: Consiste en recortes y trozos de papel provenientes de la fábrica de papel, en donde ahí son reciclados.
- Desechos de pre consumo: Son materiales que ya han pasado por la fábrica de papel, pero que han sido rechazados antes de estar preparados para el consumo.
- Desechos de post consumo: Es el papel que ya ha sido utilizado y que el consumidor rechaza, tales como revistas viejas o periódicos, material de oficina, entre otros.
El reciclaje de papel tiene límites ya que cada vez que se recicla, la fibra se hace más corta, más débil y quebradiza. En general, el papel puede ser reciclado hasta siete veces antes de ser desechado totalmente.
Ayudemos al medio ambiente, tomando conciencia de nuestras acciones diarias.